El Design Thinking utiliza la sensibilidad de los diseñadores para explorar alternativas de solución en un contexto colaborativo, donde el pensamiento disruptivo de los participantes se estimula a través de un proceso que facilita la exploración de alternativas deseables y viables.
El aprendizaje rápido, la co-creación, la comunicación intensa y la empatía con los usuarios son los ejes para diseñar soluciones innovadoras, evolutivas o radicales. Estos diseños parten de desafíos reales, de aprender haciendo, y articulan nuevas formas de estimular la capacidad creativas en torno a los problema que se afrontan.
El aprendizaje experimental permite la inmersión de los participantes en un proceso, en el que diseñan nuevas experiencias y estrategias.
El taller de Design Thinking busca explorar soluciones a los problemas de las organizaciones a través de la creatividad. Innovación es introducir novedades que generen valor. La clave reside en el componente creativo del talento humano, que requiere ser desarrollado en un proceso que estimule, motive y movilice a los colaboradores.
Generar un cambio de actitud y desarrollar habilidades entorno a la colaboración, empatía, apertura al cambio, diseño de experiencias, etc., orientadas a una cultura de la innovación.
Estimular el pensamiento disruptivo para encontrar nuevas soluciones a los problemas de siempre.
Aumentar la efectividad en el trabajo en equipo a través de una metodología colaborativa.
Generar cartera de proyectos de innovación en el contexto de la organización.